Los trabajadores de los equipos tácticos son muy susceptibles de sufrir lesiones oculares
Un soldado a veces debe enfrentarse a las tormentas de arena y los vientos secos, manteniéndose siempre atento al riesgo de explosiones y ataques. Aunque tradicionalmente se piensa que los entornos tácticos se encuentran en una zona de guerra, también pueden darse en lugares cotidianos de nuestras calles. Los equipos de protección civil, como los agentes de policía, se enfrentan cada día a retos inesperados, desde el trato con personas violentas hasta el control de multitudes y la prevención de disturbios. Estos trabajadores responden a situaciones peligrosas y a personas en apuros en entornos hostiles.
Personas intrépidas que arriesgan su vida cada día para proteger las calles, a sus conciudadanos y a sus países. En momentos de crisis puede haber consecuencias graves, como lesiones e incluso la muerte.
Para tener éxito en una misión se necesita una visión clara y precisión, pero lamentablemente las lesiones oculares son frecuentes en los entornos tácticos. Para estas situaciones peligrosas es esencial contar con un equipo de protección individual (EPI) y unas gafas de protección balística.
Los principales actores de los ámbitos tácticos y su respuesta a las crisis
Fuerzas armadas
Los soldados se someten a un entrenamiento agotador y arriesgan su vida para proteger a su país. Un soldado también puede participar en operaciones antiterroristas, de ayuda en catástrofes y en misiones de paz, actuaciones que requieren una planificación táctica.
Estados Unidos tiene el mayor presupuesto militar a nivel mundial, con un gasto de 732.000 millones en 2019. Los cinco países del mundo con mayor gasto en defensa, por detrás de Estados Unidos, son China, India, Rusia y Arabia Saudí. Sin embargo, China es el país con más personal militar, con más de 2 millones de soldados, frente a los 1,3 millones de EE.UU.
Las fuerzas armadas son muy susceptibles de sufrir lesiones de diversa índole. Un estudio reciente sobre las lesiones oculares sufridas por las fuerzas de defensa israelíes ha revelado que las explosiones son el factor que provoca un mayor número de lesiones, seguido de la metralla y las heridas de bala. Las fuerzas de élite que actúan en situaciones como en operaciones aéreas, lucha antiterrorista y operaciones encubiertas, se encuentran en una situación aún peor.
Fuerzas policiales
Aplicar la ley se ha convertido en una actividad cada vez más compleja, con funciones y amenazas que van en aumento. El siguiente estudio realizado por Niosh muestra que los agentes policiales tienen tres veces más probabilidades de sufrir lesiones que el resto de los trabajadores estadounidenses. En 2019, había cerca de 700.000 agentes del orden empleados a tiempo completo en Estados Unidos. Los organismos federales encargados de hacer cumplir la ley abarcan desde el Servicio de Parques Nacionales hasta el FBI.
Controlar los disturbios y las protestas puede ser mortal. Durante el asalto al Capitolio de Estados Unidos en enero, los agentes de policía fueron golpeados con bates, llaves inglesas y astas de banderas y rociados con gas lacrimógeno. Más de 58 agentes resultaron heridos, entre otras cosas por haber sido tirados al suelo, pisoteado y golpeado.
Investigadores del Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional comprobaron que las agresiones y los actos violentos eran la principal causa de lesiones entre los agentes de las fuerzas del orden, seguidas de las lesiones provocadas por correr o realizar otros movimientos repetitivos, y los accidentes de tráfico.
Equipos de rescate
Los bomberos, los equipos de búsqueda y rescate, los paramédicos y los oficiales de respuesta a emergencias (ERO) son los primeros en responder en momentos de crisis y emergencia. Dada la naturaleza de su trabajo, son muy susceptibles de sufrir lesiones, incluso por impactos físicos y exposiciones químicas y biológicas.
En 2019, se produjeron más de 60.000 lesiones entre los bomberos en EE.UU. En numerosas ocasiones están expuestos a la inhalación de humo y gases, pero también a múltiples peligros y enfermedades infecciosas. Las pantallas faciales y las gafas panorámicas especializadas son esenciales para proteger los ojos de los trabajadores de los equipos de rescate.
Situaciones tácticas
Campos de batalla
La gente sigue luchando en conflictos y guerras en todo el mundo, desde el conflicto iraquí hasta el de Kivu en la República Democrática del Congo. Los campos de batalla, en los que los soldados se enfrentan a explosivos, metralla y granadas, presentan grandes riesgos de lesiones oculares. En las recientes guerras las lesiones oculares sufridas durante el combate han aumentado significativamente, pasando de aproximadamente un dos por ciento en la Primera Guerra Mundial a casi un treinta por ciento en las guerras de Irak y Afganistán.
Las lesiones por introducción de cristal y otros fragmentos pueden dejar una cicatriz que provoque una alteración de la visión. Si el objeto entra en el ojo, puede dañar el iris o el cristalino y provocar ceguera o la pérdida del ojo.
Un estudio reciente ha revelado que el armamento explosivo fue la principal causa de las lesiones oculares relacionadas con la guerra en Damasco durante la crisis siria. La principal causa fueron los artefactos explosivos improvisados (IED), seguidos de las minas y los cohetes. La protección balística ocular es esencial para prevenir estas lesiones catastróficas.
Control de disturbios y multitudes
Las protestas pacíficas se convierten en disturbios cuando se destruyen bienes, se utilizan armas o hay heridos o muertos. Una vez que comienzan los disturbios, las personas dejan de estar protegidas por la Primera Enmienda y la policía debe intervenir para controlar la situación.
Las fuerzas policiales deben estar bien equipadas para gestionar estas situaciones peligrosas y protegerse. Los proyectiles como las piedras y las botellas pueden causar un grave traumatismo craneal y dañar los ojos, con la consiguiente pérdida de visión.
Protección ocular de los trabajadores de respuesta táctica
Desde las fuerzas militares y policiales hasta los trabajadores de los equipos de rescate, el trabajo táctico es peligroso, pero esencial. En situaciones intensas en las que ocurren muchas cosas a la vez y los errores pueden ser fatales, es fundamental tener una visión clara. Las gafas de seguridad son una protección clave en los ámbitos tácticos, donde las lesiones oculares y la ceguera son habituales. La elección de unas gafas de protección balística de alta tecnología y de buena calidad garantiza la protección de los vulnerables y valiosos ojos y permite a los trabajadores tácticos seguir llevando a cabo sus importante misión.
From the military and police forces to rescue workers, tactical work is dangerous but essential. Clear vision is important in intense situations where many things are happening at once and mistakes can be fatal. Safety eyewear is key protection in tactical fields where eye injuries and blindness are commonplace. Choosing high-tech, ballistic-rated eyewear that works effectively ensures protection to the vulnerable and valuable eyes and allows tactical workers to continue to complete their important missions.
